Entorno

Un poco de historia …

Valdeorras es una comarca con un amplio y dilatado acontecer histórico. El ser paso natural de entrada en Galicia, junto a su fertilidad, hizo que estuviese poblada desde tiempos muy remotos. Su historia siempre estuvo ligada a la presencia romana en el valle y la construcción de la “Vía XVIII”. Pero, antes de la llegada de los romanos, parece evidente la presencia humana por la abundancia de restos arqueológicos que se han encontrado.

Son significativos los restos de enterramientos “megalíticos” -las típicas “mámoas”- aparecidas en los montes de Cereixido (A Rúa) y en la Sierra da Enciña da Lastra (Rubiá).

Se han localizado restos de manifestaciones artísticas de la Edad del Bronce, bellas muestras de arte “rupestre” al aire libre, los famosos ‘petroglifos” en las proximidades de Valdegodos (Vilamartín), en Petín y en San Esteban de A Rúa Vella.

De épocas prerromanas, la mejor muestra de estas antiguas poblaciones son los “castros”, especies de fortificaciones que se asentaban en zonas de media montaña. Entre estos asentamientos «castrexos” podemos destacar los existentes en Coyas, Pardollán, Quereño, Castelo, Portela do Trigal, O Castro, Xirimil, Xardoal, Cabanelas (Larouco), Sta. Maria, Valencia do Sil, Arnado, Mones, Chao do castro, Vilaseco, A Capilla (Vilela), Castrillón, (Fontei), A Coroa (A Rua Vella), etc, etc.

Algunos -Castrillón, A Coroa- se identifican más como antiguas fortificaciones tipo “castellum” que como poblados propiamente dichos.

El primer conde de Valdeorras fue Bernardo Gatoniz, quien, como tal, así figuraba en el acta de la solemne consagración de la Catedral de Santiago por el rey Alfonso III el 6 de mayo de 899. A éste le sucede Froila Díaz y sus descendientes, hasta que en 1336 Ramiro Flores de Guzmán, último tenente de Valdeorras, cae en desgracia ante el rey Alfonso XI, que lo destituye y hace donación de la tierra de Valdeorras a D. Pedro Fernández de Castro, ligando nuestra suerte, a partir de este momento, a la de la todopoderosa familia de los Castros gallegos y consecuentemente a la Casa de Lemos.

(texto de Antonio Castro Voces, publicado en web valdeorras.com)